Skip to content
Oportunidades de aprendizaje

Liebres y tortugas cambian de lugar

El objetivo es estimular la atención aprovechando un cuento trabajado en el área de alfabetización.
Dificultad Avanzado
Tiempo Entre una y dos horas
¿Qué vas a necesitar?
  • Cuento “La liebre y la tortuga”

Objetivo de la actividad

El objetivo es estimular la atención aprovechando un cuento trabajado en el área de alfabetización.

Oportunidades de aprendizaje | Oportunidades de aprendizaje | Avanzado

Inicio de la actividad

Se sientan todos en una ronda, incluida la maestra. Ella pregunta si recuerdan el cuento “La liebre y la tortuga” y de qué se trataba.Se recomienda realizar esta actividad después de haber trabajo el cuento.

Desarrollo de la actividad

A continuación, la maestra divide a los niños en dos grupos: liebres y tortugas. Puede hacerlo de muchas formas, intercalando un niño que sea liebre con otro que sea tortuga, o diciendo que la mitad serán liebres (señalando a los de la parte izquierda del círculo) y la otra mitad (señalando a los de la derecha) serán tortugas. Cada niño deberá recordar si es liebre o es tortuga y la maestra lo señalará: “Tienen que acordarse de si les tocó ser liebre o tortuga”.

A continuación, la maestra dará la consigna: “Yo voy a leer el cuento, ustedes tienen que estar atentos, y cuando diga la palabra ‘liebre’ todos los que sean liebres deben pararse y sentarse en otro lugar del círculo. Cuando, en cambio, diga la palabra ‘tortuga’, los que tienen que cambiar de lugar son las tortugas. Hay que estar muy atentos, ¿empezamos?”.

La maestra leerá el cuento. Cada vez que nombre “liebre” o “tortuga” (en el cuento se menciona 15 veces cada animal) los niños deberán cambiarse de lugar según corresponda.

Cierre de la actividad

La docente solicita a los niños que evalúen cómo salió la actividad, por ejemplo, preguntando: “¿Cómo les parece que lo hicieron? ¿Se equivocaron alguna vez? ¿Cómo hacían para acordarse cuándo era que tenían que cambiar de lugar?”.

Para disminuir el nivel de dificultad

La maestra pronuncia más despacio las palabras “liebre” y “tortuga” durante la lectura del texto. Cambiar la velocidad de lectura ayudará a que los niños pongan foco en la palabra clave para moverse.

Para aumentar el nivel de dificultad

La maestra lee todo el texto en la velocidad habitual, sin hacer gestos o algo específico que marque la aparición de las palabras “liebre” y “tortuga”, por lo que los niños deberán poner más atención para detectar las palabras clave.